8 de octubre de 2016

-Espíritu-

Sospecho que otra vez ocurrió. No sé cuando...
Me agaché y un ente se me introdujo por el culo y anidó en mi alma.
Volvía al periodismo de un diario: "La Opinión".
Ya redactaba para dos blogs y una web: De mi ONG, de un centro comercial -la web- y uno literario.
Pero no era lo mismo.
La Poesía que tiene el periódico no tiene rival.
Además podría seguir dando clases de español a inmigrantes y con mis anteriores obligaciones.
Pero...
Pesaba menos. Mucho menos.
Trabajaría en Periodismo de Investigación: El sueño de todo periodista pureta -cumplo cincuenta el mes que viene-.
Comencé investigando la guerra en Siria -Ah!, me dedicaría a la Sección de Internacional-.
Y mis planes os recuerdo que son estar tres años trabajando en Internacional y rehabilitándome en el gimnasio...
Para luego convertirme en corresponsal de guerra. Dios mediante. O Belcebú...

La última vez que fui poseído por propia alma fue a la vuelta de mi viaje a la India y Nepal: Voluntario de la Madre Teresa de Calcuta, Benarés y Katmandú...
De esta vez no fue tan violento: Con la edad disminuye el ímpetu sodomizador.

Ahora duermo sólo cuatro o cinco horas, como en mis buenos tiempos de Periodista. Leo sólo poesía, que me satisface mucho más que la narrativa. Y hablo todos los días excepto fin de semana con mi adorado hijo Santi.
Cuando vuelva a A Coruña -separado, vivo sólo- le llevaré a dar un paseo y le contaré mi nuevo trabajo. Y cómo me va en él. A pesar de su Síndrome de Down lo entenderá todo: Comulgará espiritualmente conmigo.
Y entre tanto seguiré escribiendo, probablemente Poesía.
                      Kiko Cabanillas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario